El belga firmó una de sus mayores actuaciones en la UEFA Champions League
El hecho de que José Mourinho no haya querido retenerle en Stamford Bridge, es algo que sigue doliendo en el Chelsea y mucho. 4 años después y con Pep Guardiola que le respalda como nadie lo ha hecho, el crack belga acredita en Eastlands, su grandioso nivel como líder de este Manchester City, que sin embargo, ha vuelto a decepcionar en su propósito de meterse otra vez en unas semis de la UEFA Champions League. Kevin De Bruyne, por contra, ha brillado como el que más. Es un jugador a esta altura, imparable.
Por encima del resto
Es cierto que Raheem Sterling, anotó dos goles y que Sergio Aguero, uno de sus compañeros en ataque, anoto uno y estuvo muy activo en el frente ofensivo. Bernardo Silva fue un factor de desequilibrio por derecha, pero la actuación del belga, supera de lejos individualmente a las del resto de sus compañeros.
El ex del Chelsea y del Wolfsburgo, participó en el 92 % de las acciones ofensivas de su equipo (20 remates, 8 a portería). Jugando como interior por derecha, una demarcación en la que comenzó a seducir al Chelsea en sus tiempos nóveles en el Genk -aunque en sus inicios acostumbraba a jugar por izquierda- y acompañado por dos jugadores más de toque en corto y asociación pura como Ilkay Gundogan y David Silva, el belga, fue el mediocampista más ofensivo de su equipo, por su despliegue físico y por su calidad en la conducción asociada a una visión de juego letal.
De Bruyne, firmó 3 asistencias de gol en este juego (dos a Sterling y una a Aguero) una estadística que lo señala como el mayor asistente en un partido de cuartos de final de la UEFA Champions League desde el recital de Ryan Giggs ante la Roma en abril de 2007, con 4 asistencias.
Kevin De Bruyne'nin Tottenham karşısında harika performansı. Seni izlemek büyük keyif.. #DeBruyne pic.twitter.com/XsL0dMizUU
— Arda Tekin (@ardatekinn7) April 17, 2019
Su elegancia en la conducción, su forma de proteger el balón, su poderío físico para traspasar líneas de marca con el balón en los pies y su precisión en el último pase, fueron factores determinantes en la locura futbolística que fue el partido ante el Tottenham. Pese a ello, no le alcanzó a su equipo para llegar de nuevo a semifinales; para el recuerdo sin embargo, quedará una nueva exhibición que por supuesto seguirá escociendo en el exclusivo barrio de Chelsea. José Mourinho, tuvo mucho que ver en ello.
Periodista con especialización en Periodismo Deportivo
Editor Manager Discoveryfootball.com. Especialista en Fútbol Internacional
Socio de ACORD Bogotá y Miembro de AIPS
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